MUSEOS OLÍMPICOS Parte 2

Ámsterdam fue sede de los IX Juegos Olímpicos. El estadio construido para entonces, obra de un seguidor del célebre arquitecto Frank Lloyd Wright, es ahora sede del museo olímpico de la ciudad europea. Construido en un vistoso ladrillo rojo, quedó para que el equipo local de fútbol del Ajax disputara allí sus encuentros, cosa que hizo hasta la construcción del actual y moderno Amsterdam Arena. En ese momento la idea era la de demoler el estadio olímpico, pero la fuerte protesta popular lo impidió. Como resultado el estadio se reconvirtió en el museo que es actualmente, más dedicado al aspecto didáctico de formación para niños, sobre todo en cuanto a deportes tradicionales holandeses se refiere, que a un museo con material relevante. Se aconseja realizar una visita guiada, pues de lo contrario quedaría algo coja la experiencia.

Otra ciudad sede de JJ.OO. Seúl, presume de un moderno museo –para más inri, gratuito- centrado en “sus” juegos de 1988. Los nombres de sus salas nos indican el espíritu con que fue concebido el museo: Sala de la Paz, de la Prosperidad, de la Esperanza, de la Gloria y de la Armonía. Incluye salas audiovisuales, una biblioteca y sala de conferencias. Sus instalaciones parecen más platós televisivos que un espacio cultural dada la espectacularidad de su presentación. El museo cuenta además con un simulador virtual con una megapantalla de 70 m. El visionado hace revivir a los visitantes las imágenes y sonidos más memorables de Seúl 88. Está situado en el Parque Olímpico, así que un paseo por sus alrededores nos hará recordar los momentos de aquella primera cita olímpica tras dos boicots consecutivos.

En Grecia hay un museo olímpico que, contrariamente a lo que pudiéramos pensar, no está situado en Atenas ni en Olimpia (aunque aquí sí que se pueden visitar las ruinas y una exposición de esculturas y objetos antiguos). Mientras se construye un museo dedicado a los Juegos de Atenas 2004 los griegos pueden disfrutar del Museo del Deporte, con una amplia sección dedicada exclusivamente a las Olimpiadas, en la segunda ciudad del país: Salónica. Situado en el estadio de Kaftanzoglio, este museo es meramente educativo, aunque cuenta con mucha memorabilia. Uno de los objetivos de este espacio es el de ofrecer una experiencia interactiva durante la ruta por sus salas. Hasta 2004 el museo no podía ofrecer todas sus piezas por falta de espacio, pero se trasladó a un moderno edificio en el que está en la actualidad.