FANNY DURACK Y MINA WYLIE: LAS AUTÉNTICAS PIONERAS DE LA NATACIÓN OLÍMPICA
Esta es la historia de una auténtica pionera del deporte femenino, aunque siendo completamente sinceros, es la historia de dos de ellas, pues ambas compitieron juntas, fueron rivales pero eternas amigas. Es la historia de las tristemente olvidadas Fanny Durack (su nombre real era Sarah Frances Durack), nacida en 1889 y Mina (Wilhelmina) Wylie. Ambas australianas, tuvieron que persuadir, literalmente, a los dirigentes encargados de enviar la expedición australiana a los Juegos Olímpicos de 1912 -a celebrar en Estocolmo- para poder acudir a ellos. Y es que iba a ser en esos Juegos donde debutaría la natación femenina. Sólo lo harían, eso sí, en una prueba de 100 metros, con bañadores hasta la mitad del muslo y muchas de ellos con mangas. El Comité Olímpico Australiano consideraba un despilfarro llevar a mujeres, así que las familias de estas nadadoras tuvieron que reunir dinero por su cuenta para poder enviarlas a cumplir su sueño. Les salió rentable el gasto, puesto que Fanny ganaría el oro y Mina la plata.
Lo curioso es que Fanny sólo sabía nadar a braza porque, asómbrense, era el único estilo que tenía campeonato para mujeres. Tuvo que ir a América para mejorar en el estilo libre, junto con su amiga Mina. Fanny llegó a dominarlo de tal manera que no solo se haría con el oro olímpico (el primero y el primero para una australiana), sino que en el periodo que va de 1910 a 1918 se la consideró la mejor nadadora del mundo en todas las distancias en estilo libre.
A los Juegos de Estocolmo no solo tuvieron Fanny y a Mina las trabas económicas de tener que financiarse el viaje, sino que se las obligó pagar los pasajes de acompañantes. Durack ya batió el récord mundial de los 100 metros en las series.
Hablemos un poco más de Mina Wylie. Su padre poseía unas piscinas en la localidad de Coogee. Durante toda su carrera compitió contra Durack, pero, como hemos dicho, entablaron unos fuertes vínculos de amistad. Gracias a sus medallas en los Juegos de Estocolmo y aprovechando su viaje al “viejo continente” ambas fueron invitadas a eventos natatorios por toda Europa. En ellos Fanny invariablemente ganaba siempre, quedando Mina segunda. Y esas invitaciones llegarían luego desde otras partes del mundo. También lograban reunir a masas ingentes en su propio país, deseosas de ver a las dos mejores nadadoras del momento. Los propios clubes de natación de Australia les ayudaban económicamente para poder viajar y nadar en otros países. En 1918 fueron a América, donde en un principio sufrieron varias inesperadas derrotas. Pero lo peor es que su gira por Estados Unidos les hizo perder su estatus de amateurs, lo que les causaría una sanción en su país. En su gira americana llegaron a competir con Ethelda Bleibtrey, que ganaría el oro en los Juegos Olímpicos de Amberes 1920. Sobre esta cita olímpica hay que recalcar que Fanny Durack sufrió una apendicitis justo una semana antes de la fecha prevista para partir hacia los Juegos. Tuvo que ser operada de urgencia, a lo que siguió fiebres tifoideas y hasta neumonía, todo ello le impidió, naturalmente, participar en la cita olímpica de 1920.
Una vez retiradas Fanny Durack y Mina Wylie compartieron actividad, pues ambas se dedicaron a entrenar a chicas. Su amistad perduró el resto de sus vidas.
Un comentario
Virginia
Bonita historia!