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NAM HYUN-HEE: LOS ENGAÑOS EN LA VIDA DE UNA MEDALLISTA OLÍMPICA

La palabra “escabrosa” se queda corta para definir el escándalo que rodeó a la medallista olímpica surcoreana de esgrima -la primera de su país en serlo- Nam Hyun-hee. Antes de su retirada era una figura extremadamente popular en su país pues se había hecho con la plata de florete en los Juegos de Pekín de 2008 y la de bronce por equipos en los siguientes de Londres. En esa edición olímpica, por cierto, perdería el bronce individual ante la leyenda de la esgrima Valentina Vezzali tras ser superada en apenas los trece segundos finales cuando llevaba una ventaja de cuatro puntos en una de las finales más épicas y emocionantes que se recuerdan de la esgrima olímpica. Pese a esa derrota como decimos cuenta en su haber con dos medallas olímpicas, a la vez que seis en Mundiales.

Casada durante doce años con el ciclista Gong Hyo-suk anunció al poco de divorciarse su compromiso matrimonial con Jeon Cheong-jo, supuestamente un joven heredero de una familia millonaria poseedora de un casino y varios resorts. La exatleta sabría al parecer que su prometido había sido una mujer que se había sometido a una operación de sexo, aunque ese dato no se dio a conocer más tarde, cuando se destapó todo el escándalo.

Foto de Getty Images

Jeon en realidad nunca se sometió a operación alguna y siguió siendo una mujer. Esa condición se supo tras cometer un error de primero de básica por parte de la pareja: la publicación del anuncio de su compromiso matrimonial en una revista surcoreana. Al hacerlo público personas que conocían a Jeon hicieron público que no solo no era un hombre, sino que había mentido sobre sus orígenes (en realidad provenía de un modestísimo barrio y no tenía relación alguna con una familia adinerada) y, especialmente, sobre su pasado delictivo habiendo estafado a varias mujeres.

La investigación policial empezó entonces, siendo acusada Jeon de haber estafado 2.1 millones de euros a diversas personas, hasta 27 en total. En 2024 fue sentenciada a doce años de cárcel. Nam alegó enseguida y en todo momento ser una de sus víctimas, desconocer tan siquiera el verdadero género de su prometido/a e incluso haber creído el engaño de Jeon cuando le presentó una prueba falsa de embarazo para hacer creer a Nam que ésta estaba embarazada. Cuando la extiradora de esgrima fue preguntada cómo pudo creerse embarazada por alguien que no podía dejarla embarazada afirmó que se creyó que tenía la función reproductora debido supuestamente al implante de un testículo “donado por el hermano de Jeon”. La medallista olímpica negó conocer el pasado real de su prometido/a ni, por supuesto, los delitos que había cometido, aunque Nam también fue investigada como sospechosa prohibiéndosele salir del país. Lo cierto es que una parte importante del dinero estafado por Jeon fue a parar a las manos de Nam en forma de regalos carísimos entre los que se cuenta un automóvil Bentley y otros objetos de lujos.

Foto de Alexander Hassenstein

El asunto se complica si tenemos en cuenta que meses más tarde se puso en punto de mira nuevamente a Nam al sospechar que el anuncio oficial en prensa de su compromiso coincidió con otra investigación paralela sobre abusos sexuales que habría cometido un entrenador del lujoso gimnasio perteneciente a la olímpica. Ella negó en todo momento conocer esos abusos, pero ahora se sospecha que publicó el anuncio de su compromiso para desviar la atención público sobre el escándalo, de otra índole, que estaba sucediendo en el gimnasio de su propiedad. No solo eso, sino que la Policía sospecha que fue abiertamente una cómplice de Jeon en sus delitos ya que se considera que ella ya había demostrado dotes empresariales y en absoluto ser “una persona aislada, a la que su pareja había hecho luz de gas y privada de toda toma de decisiones en asuntos financieros” como quiso hacer ver cuando el escándalo estalló.

Nam rompió con Jeon al saberse los hechos y fue a refugiarse a casa de su madre y aquí el caso se complica incluso algo más, pues al pasar Jeon horas tocando a la puerta de la casa de su “suegra” fue detenida por acoso hacia Nam.

¿Fue Nam Hyun-hee una víctima inoncente más de Jeon? ¿Fue su compinche y beneficiaria de sus estafas? ¿Acabará en la cárcel como su expareja? El tiempo lo dirá.

Al hacer público su compromiso de boda

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