Entrevistas

LAS SUBCAMPEONAS OLÍMPICAS DE BASKET 3×3: “LA OTRA MEDALLA ES LA VISIBILIDAD Y REPERCUSIÓN QUE HEMOS TENIDO”

El baloncesto español está acostumbrado a ganar medallas olímpicas en las últimas ediciones, tanto en categoría femenina como en masculina. En París 2024 se rompió esa racha…o no, porque esta vez, aunque los y las jugadores de basket en sala se fueron de vacío sí lograron metal las jugadoras de la modalidad que hizo su debut en Tokio 2020: el baket 3×3. Las cuatro -Vega Gimeno, Sandra Ygeravide, Juana Camilion y Gracia Alonso- hicieron vibrar, por sorpresa, a los aficionados españoles, aportando una valiosa medalla de plata con la que muy pocos contaban. Quizá por eso mismo sepa aún mejor.

Charlamos con Vega Gimeno y con Sandra Ygeravide en plena villa olímpica. Nos confiesan que la sorpresa de la medalla también fue de su parte. Vega Gimeno: No esperábamos la medalla, sí que esperábamos competir cada día, que era la idea que llevábamos pero de ahí a llevarnos una medalla, la verdad es que no. Confiábamos, pero no tanto”. Su compañera Sandra, nombrada integrante del equipo ideal del torneo, lo corrobora: Vinimos a hacer lo que hacíamos siempre: darlo todo en cada partido. Conforme se fueron dando las cosas vimos que cada vez había más opciones, aunque nunca piensas que esas opciones van a pasar por una final, pero es verdad que hemos competido muy bien y que eso nos ha llevado a estar en esa final”.

Gran parte de la “culpa” de que su medalla ha sido una -agradable- sorpresa inesperada  la tiene el desconocimiento de su deporte. Puede que más de uno se haya enterado gracias a lo que se habló de su logro de que ese deporte, cuya práctica está muy extendida desde la infancia, formaba parte del calendario olímpico. Muchos, por tanto, han conocido este deporte a nivel élite gracias a la medalla del cuarteto español. Quizás ése haya sido el mayor premio logrado por ellas. V.G.: “La otra medalla de todo esto es la visibilidad y repercusión que hemos tenido en España, el que nos haya seguido muchísima gente. Hoy nos dijeron los datos de la tele y ha sido una locura: dos millones de personas y en otras plataformas también muchísimos. Creo que eso es otro de los éxitos de estos Juegos”. Y, de nuevo, Sandra es de la misma opinión: “Esperamos que esto sirva como empujón para que siga creciendo nuestro deporte, para que se empiecen a hacer cosas: ligas, copas…como hay en el 5×5 y que siga creciendo de cara a que en Los Ángeles en cuatro años ya no haya esas dudas con nosotras y que se apueste por que se puede conseguir otra medalla”.

Eso es precisamente lo que se espera que provoque este éxito olímpico: además de dar a conocer este deporte, que sirva para su despegue definitivo a nivel de clubes. No solo en España existe esta situación, ya que algunos jugadores/as incluso medallistas olímpicos provienen del baloncesto en sala o vuelven a él para participar sólo esporádicamente en el basket 3×3 debido a que la plena profesionalidad sólo se ha alcanzado en pocos casos. La inclusión en el programa olímpico de esta modalidad deportiva está suponiendo una plataforma de despegue para la misma, aunque aún hay mucho camino que recorrer.

Foto de Europa Press

Volviendo al torneo olímpico Sandra destaca el montaje en el cual estaba inmerso el basket 3×3, en plena Plaza de la Concordia, conviviendo en un espacio con otros deportes de los denominados ‘urbanos’: Ha sido muy bonito cómo ha estado montado el basket 3×3 desde el día 1, daba igual quiénes jugaran, daba igual si el público iba contigo o no. Creo que la gente lo ha disfrutado muchísimo. Nosotras lo hemos disfrutado también porque creo que jugar en un ambiente así y jugar con tantísima gente y que lo disfruten al final nos llena un poco de orgullo”. En efecto, el enclave no podía ser más mágico. Incluso se llegaron a vender entradas sin opción a las gradas, sino tan solo para ‘vivir la experiencia’ de estos deportes. En ocasiones había tanto público para el basket 3×3 fuera de la grada, desde ‘la plaza’, de pie, siguiendo con sumo interés el desarrollo de los partidos, que en los propios asientos de la grada. Sin duda ha supuesto todo un éxito para este deporte un tanto denostado de primeras para el que no lo conoce.

Los que hayan visto partidos de basket 3×3 sabrán que, en tan poco tiempo (diez minutos como máximo o llegar un equipo a 21 puntos) puede ocurrir de todo y lo más normal es que los marcadores resulten estar muy igualados, cuando no empatados al finalizar -como ha ocurrido en unas cuantas ocasiones en esta edición olímpica- teniendo que disputarse unos minutos extra. Por eso no extraña el desarrollo de la final femenina, que las españolas disputaron…y perdieron cuando la tenían al alcance de su mano. Vega nos cuenta cómo se sintieron ante ese resultado: Es verdad que la final ha sido de las derrotas más dulces de nuestras carreras porque te da rabia perder con un final súper apretado pero es una medalla olímpica”. En efecto, Sandra, Vega, Julia y Gracia se hicieron con una plata que sabe a oro y que auguramos valdrá más que su peso en un futuro a corto y medio plazo, pues servirá de impulsor de un deporte que, en España, les debe mucho a ellas cuatro. De momento ya hay muchas más personas que lo conocen y antes no lo hacían gracias a ellas.

Foto de Getty

Un comentario

  • Virginia

    Vi algo por televisión y es muy emocionante y me gustó porque es rápido,es muy difícil aburrirse ya que en muy poco pasan muchas cosas. Les deseo lo mejor para Los Ángeles.

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