RICHARDSON VIANO: EL HUÉRFANO PRIMERO EN SER OLÍMPICO POR HAITÍ EN ESQUÍ ALPINO
Hay dos tipos de pioneros en el deporte en general y en el olimpismo en particular: los primeros grandes campeones o deportistas que baten récords mundiales, los más galardonados, etc. y los primeros deportistas en representar a su país en un deporte determinado. Este es el caso de Richardson Viano, primer haitiano en participar en esquí alpino en unos Juegos Olímpicos.
Viano nació en Haiti pero cuando contaba un año y medio fue adoptado por el matrimonio franco-italiano compuesto por Andrea Viano y Silvia Grosso junto a Bellandine y Natacha, dos niñas que se encontraban en el mismo orfanato. Viviendo ya en Francia enseguida su padre, instructor de esquí, le colocó unos esquíes en sus pies y pronto demostró tener dotes. En un principio quería formar parte del (potente) equipo francés, pero no lo consiguió. Fue entonces cuando consideró abandonar la práctica deportiva…hasta que recibió una llamada telefónica que tomó como una broma realizada por algún amigo. En realidad se la había realizado Jean-Pierre Roy, presidente de la recién creada (por él) Federación de Esquí de Haití. Estaba buscando a esquiadores de origen haitiano y dio con Richardson. Viano, tras la llamada, buscó su nombre en internet y, al darse cuenta de que no le había engañado y de que se trataba del presidente de la federación le devolvió la llamada. El resto es historia, para él y para su pequeño y paupérrimo país.
Richardson está especializado en gigante y en eslalon. Desde 2019 tiene el pasaporte haitiano y la Federación Internacional aceptó su cambio de nacionalidad. Es verdad que no le hemos visto en los podios de las competiciones internacionales, ni siquiera en los esquiadores que conforman el primer grupo, pero ha obtenido resultados aceptables, como un nada despreciable 35º puesto en el Mundial de 2021 en la especialidad del gigante y obtuvo casi un centenar de puntos FIS valederos para su clasificación para los Juegos de invierno celebrados en Pekín en 2022. Así, Viano estuvo en los Juegos, el primero de su país en competir en esquí alpino. Curiosamente coincidió allí con otro caribeño: el jamaicano Benjamin Alexander, con el que compitió en la misma prueba del gigante. Fueron los primeros esquiadores caribeños en participar en unos Juegos de invierno en la modalidad de esquí alpino.
Richarson Viano, con su logro de convertirse en olímpico representando a un país sin tradición en deportes de invierno y, sobre todo, sin medios, quiso inspirar a jóvenes haitianos: “Darles sueños a través del deporte y sus valores”. En efecto, Viano no acudió a los Juegos Olímpicos como mera anécdota, aunque haya sido su origen y no sus resultados los que hayan despertado la curiosidad de la Prensa. Para Richardson Viano ha sido todo un orgullo lucir en unos Juegos Olímpicos los colores de la nación que le vio nacer, esperando que pronto se le sumen algunos compatriotas.
Un comentario
Virginia
Siempre descubro historias nuevas e interesantes,genial!