CAMMI GRANATO: LA CAMPEONA OLÍMPICA QUE HIZO CRECER EL HOCKEY HIELO FEMENINO

Catherine ´Cammi´ Granato parece que vino al mundo para romper barreras y lleva décadas haciéndolo. Comenzó desde niña, cuando con cinco años empezó a jugar al hockey hielo pese a que sus padres querían que se interesara por el patinaje artístico. No es de extrañar que Cammi escogiera el hockey, puesto que su padre ya era un jugador amateur y sus cuatro hermanos se dedicaban al hockey. Uno de ellos, Tony, jugó en varios equipos de la NHL mientras otro, Don, lo hacía en ligas menores. El empeño de Cammi de seguir sus pasos triunfó y se impuso a su vez al deseo de sus hermanos a que jugara como portera, pero ella prefería moverse por la superficie de hielo. Sus padres tuvieron que claudicar con una condición: que Cammi demostrara que se tomaba en serio el hockey. Cammi lo cumplió con creces, llegando a jugar hasta los 16 años en equipos de chicos. Primera barrera (la familiar) derribada, pese a que entre medias tuvo que sufrir bullying acusada de no ser lo “suficientemente” femenina (si es que existe esa concepción) llegando a ser lesionada a propósito en un partido.

Para cuando Cammi se pasó definitivamente al hockey de chicas éste estaba casi en pañales. Perteneció a la selección nacional de Estados Unidos desde sus inicios, en 1990, hasta 2005, cuando no fue incluida en la selección para tomar parte en los Juegos Olímpicos de Turín de 2006 en una controvertida decisión que aún no se explica. Entre medias Granato ganó el oro de los Juegos de Nagano y la plata de Salt Lake City. Tuvo además el honor no solo de capitanear la potente selección USA, sino de marcar el primer gol de su país en un torneo olímpico. Y es que Cammi Granato es una goleadora nata, habiendo marcado para su selección 186 goles y 157 asistencias que la convierten en la máxima goleadora de siempre de la selección estadounidense.

Con el tiempo Cammi Granato ha seguido rompiendo barreras y se ha convertido en una de las máximas voces del hockey femenino a nivel mundial. Ya el oro de los Juegos de Nagano inspiró a otras mujeres de su país a practicar el hockey hielo, que hasta entonces sólo era visto como un deporte para hombres por gran parte del público. Cammi no se ha querido bajar de esa posición que le permite llamar la atención y centrar el foco en el hockey femenino. El 25 de septiembre de 2019 rompió una nueva barrera siendo elegida como primera mujer ojeadora de un equipo de la NHL (en su caso el Seattle Kraken). Con ello abrió una puerta que ha permitido que otras mujeres siguieran sus paso, pues desde entonces otras cuatro mujeres han sido contratadas también como ojeadoras de otros equipos de la NHL, la mayor y más potente liga de hockey hielo del mundo.

Cammi Granato no se ha quedado ahí. En 2022 se ha convertido en asistente del general manager de un equipo de la NHL (el Vancouver Canucks), aunque en este caso no ha sido la primera mujer en la historia en serlo, ya que antes que ella otras dos mujeres consiguieron ese puesto, la primera de ellas en el ya algo lejano 1996. Granato, no obstante, sí que fue pionera en otra faceta, pues en 2010 fue la primera mujer en entrar en el Salón de la Fama del Hockey.

La inquieta Granato ha entregado su vida al hockey hielo en múltiples facetas: siendo comentarista de televisión para la NBC (no solo hockey femenino, sino también partidos de la NHL), comentarista de radio, ha realizado podcast, ha escrito un libro titulado “Yo también puedo jugar” que anima a las niñas a jugar al hockey y es incluso socia de una empresa que confecciona accesorios de hockey para chicas.

En definitiva, nada ha parado a Cammi Granato, pese a haber vivido los albores del hockey hielo femenino, el cual ha evolucionado en estos años en todos los aspectos muy mucho gracias en parte a sus contribuciones.