KIM MEYLEMANS Y NICOLE SILVEIRA: RIVALES EN PEKÍN 2022 Y PAREJA FUERA DE LA PISTA

Son rivales en la pista de hielo…pero compañeras de vida. La belga Kim Meylemans y la brasileña Nicole Silveira coincidieron durante años compitiendo en pruebas de la Copa del Mundo de skeleton. Como representantes únicas de sus países carecían de compañeras compatriotas con las que compartir momentos. Meylemans, nacida en Alemania de padres belgas, durante años participó representando a Alemania, potencia indiscutible de este deporte. Hasta que en la temporada 2014/15 se mudó al país de sus padres y pasó a defender los colores de Bélgica. Por su parte si se preguntan qué hace una brasileña compitiendo en un deporte de hielo la explicación es simple: Silveira se mudó a Canadá contando siete años de edad. En los Juegos de Pekín 2022, donde rivalizó con la que ya por entonces era oficialmente su pareja, Silveira se convirtió en la primera brasileña olímpica de skeleton. Además su decimotercer puesto supuso el mejor de un atleta de Brasil en deportes olímpicos de hielo.

En la Navidad de 2021, es decir, pocas semanas antes de la cita olímpica de Pekín, ambas hicieron público que eran pareja mediante una foto en Instagram. No les fue fácil “salir del armario”. A la brasileña porque no tenía claro ni siquiera su condición e incluso “escondió” a Kim durante un tiempo. Por otra parte, la propia Meylemans confesó que fue amenazada y acosada por rusos por ser LGTBI. Esos hechos ocurrieron cuando aún era apenas una adolescente. La belga se negó a participar en 2016 en el Mundial que debía celebrarse en Sochi, Rusia y que finalmente tuvo que cambiar de sede por las protestas y amenazas de boicot de muchos participantes, no solo de la belga. Se oponían por el ya por entonces demostrado dopaje sistemático de los deportistas rusos.

Kim Meylemans tomó parte en sus primeros Juegos Olímpicos en Pyeongchang 2018, convirtiéndose en la primera belga de skeleton en competir en unos Juegos. Desde entonces y hasta la siguiente cita olímpica de Pekín mejoró en sus resultados ocupando los diez primeros puestos en pruebas de Copa del Mundo en múltiples ocasiones. Es cierto que su pareja, Nicole Silveira, está a un nivel inferior, pero entra entre las 20 primeras prácticamente siempre, lo cual ya es meritorio. Sí, hubiera sido particularmente atractivo un duelo por una medalla olímpica entre ellas dos, pero las posibilidades dadas sus trayectorias previas lo hacía muy difícil. Sí que protagonizaron (más bien Kim únicamente) una situación peculiar a su llegada a la villa olímpica de Pekín. La belga, que había superado una docena de test en los que había dado negativo por coronavirus, se vio en la tesitura de ser aislada por dar positivo en la capital china. Su vídeo llorando explicando su situación, en la que veía peligrar incluso su participación y en la que temía tener que pasar incluso semanas aislada completamente se hizo viral. Huelga decir que, aunque preconvivientes, no se permitió que Kim y Nicole compartieran alojamiento durante los Juegos. En parte por haber dado positivo Kim y en parte porque los estrictos protocolos anti Covid impedían la relación entre participantes de diferentes países, salvo en el comedor y con cierto distanciamiento. En definitiva, Kim y Nicole no pudieron disfrutar juntas de su primera experiencia olímpica como pareja (primeros Juegos además para la brasileña).

Silveira ha confesado que Kim ha sido un referente para ella dado su nivel y que ambas intercambian información sobre su deporte “hasta cierto punto” ya que defienden los colores de distintos países. Y coinciden en otra cuestión: ambas consideran que su situación es “singular” al competir juntas en el mismo deporte y las mismas pruebas y que eso es “divertido y, al mismo tiempo, un desafío”. El no tener que competir una contra otra a la vez (realizan bajadas a la pista por separado y se considera el tiempo empleado) ayuda a no verse como auténticas rivales. Las circunstancias no les permitieron vivir juntas unos Juegos Olímpicos pero más oportunidades les esperan en el futuro.