ERIN JACKSON Y EL GESTO GENEROSO DE BRITTANY BOWE CEDIÉNDOLE SU PLAZA OLÍMPICA PARA PEKÍN 2022
La número 1 del ránking mundial de patinaje de velocidad en la distancia de 500 metros no iba a ir a los Juegos Olímpicos de Pekín 2022. Pese a que Erin Jackson había ganado cuatro de las ocho carreras del circuito de la Copa del Mundo, además de haber logrado un segundo y un tercer puesto, falló estrepitosamente en los trials de clasificación olímpica de su país, Estados Unidos. Pero entonces llegó su colega y sin embargo amiga del alma Brittany Bowe para deshacer el entuerto. En los trials se clasificarían para Pekín las dos primeras patinadoras en cruzar la línea de meta. Bowe lo hizo en primer lugar pero la favoritísima Jackson sólo pudo ser tercera, lo que la dejaba fuera de los Juegos. Jackson, que en noviembre de 2021 se convirtió en la primera patinadora de color en ganar una prueba de la Copa del Mundo, sufrió un resbalón en la carrera y dio así al traste con sus esperanzas de ir a los Juegos. Tanto Jackson como Bowe son oriundas de la misma localidad -Ocala, Florida- y se conocen de toda la vida. Empezaron juntas en un club de patinaje…pero no sobre hielo, sino en línea. Bowe, cuatro años mayor que Jackson, ya se había clasificado para los Juegos en otras dos distancias, los 1.000 y los 1.500 metros. La noche de la final de los 500 metros de los trials disputados en Milwaukee Erin no pegó ojo recordando su error, mientras que Brittany rumiaba una decisión que daría a conocer a la mañana siguiente primero a su amiga y luego a la federación de su país: cedería su plaza para Jackson, pues la consideraba merecedora de ir a los Juegos, teniendo en cuenta el nivel que presentaba durante la temporada preolímpica. Un gesto generoso (que, por cierto, no es la primera vez que se da), altruista pero en cierto modo esperable, dada la amistad que les une y que, en justicia y lógica, el papel que en teoría Erin Jackson puede hacer en Pekín es mejor en la distancia de 500m que el de la propia Bowe. Ésta alegó que además su decisión se debía “al espíritu olímpico” y al de equipo, el buscar lo mejor para el Team USA y añadió “Erin tiene la oportunidad de traernos una medalla, espero que de oro, y es un honor para mí darle esa oportunidad”.
No podemos dejar de contar el caso excepcional y único de Erin Jackson previo a estos Juegos, de hecho, previo a la anterior cita olímpica de Pyeongchang. Porque Erin protagonizó entonces un caso particular. Como hemos dicho, se inició en el patinaje en línea (es decir, sobre ruedas). Fue su primer descubrimiento, en el que despuntó. Era normal que, creciendo en Florida, se dedicara a esa especialidad y ni mucho menos la del patinaje de velocidad sobre hielo. Durante casi dos décadas se dedicó en cuerpo y alma a esta modalidad, así como la de roller derby (patinaje sobre ruedas en grupo). Todo ello lo compaginó con los estudios universitarios, graduándose cum laude en la universidad de Florida con honores en Ingeniería y ciencia de los materiales. Y, de repente, cuando faltaban escasos cuatro meses para los Juegos de Pyeongchang cambió los patines por unos de hielo logrando clasificarse para los Juegos. En realidad tuvo que tomar prestados unos patines. El porqué del cambio lo pueden deducir: Erin tenía el sueño de ser olímpica y, como se sabe, el patinaje en línea no ha entrado en el calendario olímpico. Cuando logró entrar en el equipo olímpico para Pyeongchang su teléfono quemaba, recibiendo más de 2.000 mensajes en unas pocas horas. El sueño de ser olímpica lo cumplió en la localidad surcoreana, donde acabó en 24º puesto. El de soñar en firme con la posibilidad de conseguir una medalla olímpica se lo ha facilitado su compañera y amiga Brittany Bowe.
Actualización: En Pekín 2022 Erin Jackson consiguió finalmente el oro en la prueba de los 500m y Brittany Bowe el bronce en la de 1000m.
Un comentario
Virginia
Bonita historia de amistad.