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JULIEN ABSALON: QUIZÁS EL MÁS GRANDE CICLISTA MASCULINO DE MOUNTAIN BIKE EN JUEGOS OLÍMPICOS

Con 37 años cumplidos una leyenda olímpica se retira por una causa insospechada: alergia al polen. El francés Julien Absalon, bicampeón olímpico y once veces medallista en campeonatos mundiales de ciclismo en la modalidad de mountain bike, no puede seguir compitiendo al aire libre debido a que se ha agravado la alergia al polen que ya tenía. Con algo de sangre en los bronquios y sin poder respirar, el que sea posiblemente el mejor ciclista de su modalidad ha tenido que retirarse. Absalon hizo historia en los Juegos de Pekín 2008, cuando fue el primer ciclista de montaña en revalidar el título olímpico.

Julien Absalon empezó tarde en su deporte, con 14 años, y lo hizo de una manera casual, cuando un vecino le vio sobre una bicicleta y se dio enseguida cuenta de sus habilidades, recomendándole dedicarse por entero a ese deporte. De no ser por ello, no estaríamos hablando del francés ahora mismo. Su vecino no se equivocó, pues tan solo cuatro meses después de empezar a entrenar ya quedó cuarto en el campeonato nacional y no le llevó más de dos años proclamarse campeón del mundo por primera vez. Entrenar diariamente de dos a cinco horas y quemando mil kilocalorías por hora, todo ello durante más de veinte años, ha producido infinidad de trofeos para este deportista nacido en los Vosgos.

Aunque se diera cuenta tardíamente del deporte de la mountain bike, Absalon parece haber nacido para él. Lo que más le gusta es que se realiza en la naturaleza y al aire libre, algo fundamental para él. Ello le ha producido siempre una sensación de libertad.

En los más de veinte años de carrera de este ciclista galo, conocido por la meticulosidad en su profesión y su obsesión en eliminar todo el peso posible en sus bicis (incluso llegando a sustituir tornillos metálicos por plásticos) su herramienta de trabajo, la bicicleta, ha evolucionado muchísimo. En muy poco se parecía en sus últimos años de carrera a aquellas con las que empezó. La evolución técnica se fue produciendo a pasos de gigante y a Absalon le costaba adaptarse. Sólo en los últimos años logró por fin adaptarse, pero en su caso le ha fallado otro elemento tangencial pero, no obstante, fundamental: la citada alergia.

Foto de Pascal Guyot/AFP

Absalon, que ha llegado a declarar que tiene más habilidad sobre una bici que andando, no se ha librado todos estos años de múltiples lesiones. En su caso ha sufrido rotura de clavícula, dedos, de ocho costillas y del radio en dos ocasiones. En cuanto a los Juegos Olímpicos, ha disputado cuatro. Aunque lo que se dice propiamente disputar no deberíamos casi contar con sus terceros Juegos, los de Londres 2012. A la capital británica fue preparado durante cuatro años para estar al 100% el Día D a la Hora H. Sin embargo, casi nada más empezar sufrió un pinchazo. Al verse enseguida con un considerable retraso debido al mismo, en la 25ª posición, se desmotivó. Su pretensión era seguir haciendo historia y conseguir el tercer título olímpico consecutivo. Viéndose sin posibilidad si quiera de medalla abandonó. Londres 2012 se convirtió desde ese mismo instante en la desilusión más grande de su carrera.

Tenemos que retrotaernos a 2004 cuando ganó su primera presea de oro en los Juegos de Atenas. Victoria con un trasfondo personal, al dedicársela a su recién fallecido padre señalando el cielo al cruzar la línea de meta. Ganó con una gran ventaja: de un minuto sobre el campeón de Europa, el español José Antonio Hermida y dos sobre el hasta entonces campeón olímpico, el holandés Bart Brentjens. Esa edición fue tan calurosa que, en medio de la misma, su mujer se desmayó. Su segundo título lo conseguiría cuatro años más tarde en Pekín 2008 con aparente facilidad, en cabeza desde el principio. Su victoria pareció sencilla, pero el ciclista manifestó después haber padecido calambres. De nuevo la carrera se dio en circunstancias de calor extremo, pero el galo se había preparado a conciencia, entrenando en las horas más calurosas del día para preparar su cuerpo. Su ciclo olímpico se cerró en Río 2016 con un para él decepcionante octavo puesto, más si tenemos en cuenta que nunca llegó a entrar en carrera en la disputa de medallas. Hasta que surja un nuevo gran campeón, Julien Absalon será considerado el mayor ciclista olímpico de mountain bike.

Cruzando la meta de Pekín 2008. Foto de IC

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