FRANÇOIS ALLAIRE, ENTRENADOR DE PORTEROS EN LA NHL: “LOS JUEGOS OLÍMPICOS SIEMPRE HAN CAUSADO MUCHOS PROBLEMAS A LA NHL”
Mucho se ha hablado sobre la participación –o no- de los jugadores de la liga norteamericana de hockey hielo (NHL) en los próximos Juegos de Pyeongchang. Las conversaciones entre las dos partes han durado meses pero, aunque hay quien no pierde la esperanza hasta el último momento, todo hace pensar que esta vez los jugadores que juegan la prestigiosa Stanley Cup no tomarán parte en la cita olímpica.
Hablamos sobre ese espinoso tema y otros de la no siempre armoniosa relación entre Juegos Olímpicos y National Hockey League con el entrenador de porteros canadiense François Allaire. A sus espaldas 33 años en la NHL y, entre otros logros, creador desde los años 90 de métodos para una nueva generación de porteros. Inventor de un estilo propio que ha creado escuela, basado en el “estilo mariposa” -por el que el portero baja las rodillas para bloquear los tiros- que ha supuesto toda una revolución en el deporte del hockey hielo. Ha ganado tres trofeos de la máxima liga mundial, llegando a las finales en otras dos ocasiones. Él mismo no ha sido olímpico, a su pesar, pero sí ha entrenado a numerosos jugadores medallistas olímpicos, tanto de su país, Canadá, como de Rusia y Estados Unidos.
Obligado comparar los dos torneos más importantes a nivel mundial del hockey, a menudo en tensión: los Juegos Olímpicos y la NHL. Al respecto, Allaire nos comenta: “Ganar una NHL es una sensación estupenda, algo que recordarás durante toda tu vida, en la que llevarás por siempre el orgullo de ser el vencedor de la Stanley Cup. La Stanley Cup es un trofeo realmente importante. Como la NHL dura meses, escuchas hablar sobre ella todo el año, mientras que los Juegos se desarrollan durante solo dos semanas cada cuatro años. Los norteamericanos están más volcados en su liga, mientras que los europeos están más involucrados en los Juegos Olímpicos y los Mundiales”. Las diferencias se agudizan en el caso de su país, Canadá, ya que “hemos estado en la Liga durante más de cien años, así que tiene mucha tradición entre nosotros. Cada año hay un nuevo campeón. Alrededor de la liga se mueven muchos medios de comunicación. Hay muchas menos participaciones olímpicas que participaciones en la NHL, está claro”
El choque -que parece esta vez inevitable en el caso de la edición surcoreana-, entre NHL y cita olímpica se fundamenta en dos problemáticas: el calendario y las lesiones: “Si los jugadores vuelven sin lesionarse no hay problema. Lo que pasa es que se van tus mejores jugadores y vuelven cansados, con jetlag, no están frescos para jugar. Si además se lesionan eso hace que la ecuación sea desfavorable para que la NHL deje participar a sus jugadores en los Juegos Olímpicos. Están contentos de que vayan, pero al mismo tiempo les preocupa que se lesionen”, comenta el técnico canadiense sobre la segunda cuestión. Y sobre la primera opina: “Los jugadores quieren representar a sus países pero al mismo tiempo los dueños de los equipos son los que pagan sus salarios. Hay que respetar eso también. Si uno te está pagando cinco millones de dólares al año, ése es tu jefe. Si el jefe dice que no vayas, no vas. El mayor problema es que los Juegos están justo en medio de la temporada de la NHL. Creo que en ese sentido el fútbol está mejor organizado a nivel internacional y siempre se juega con las mismas reglas, cosa que no ocurre en el hockey”. François Allaire llega a ser tajante afirmando que “los Juegos siempre han causado muchos problemas a la NHL. Se han producido lesiones y los Juegos no han pagado a los clubes por las mismas”, refiriéndose a la falta de acuerdo de las aseguradoras en caso de lesión producida durante el torneo olímpico.
El único aspecto positivo, desde su punto de vista de técnico de un club de la NHL, sobre los JJ.OO. es cuando sus jugadores vuelven con una medalla al cuello: “entonces vuelven más fuertes, más felices, mejores jugadores, seguro. Pero luego tienen que jugar con sus compañeros de equipo a un nivel diferente”. Pese a que dado su cargo en la NHL podría no interesarle la participación de sus jugadores en los Juegos, Allaire no deja de ser un amante del hockey y, por tanto, de lamentar la ausencia de los mejores. “Es una pena que los jugadores de la NHL no vayan a Pyeongchang porque no se verá el mejor torneo. Es muy difícil porque el calendario hace que paren durante tres semanas y eso es un problema”. Aun así, está convencido de que ambas partes están condenadas a entenderse en un futuro, llegando a afirmar “Estoy seguro de que en Pekín 2022 volverán”.
A nivel personal lamenta no haber podido participar aún en una edición olímpica, porque “hay reglas que me lo han impedido. En el cuerpo técnico se permite un número menor de entrenadores y asistentes en los Juegos que en la NHL. Desde luego que me habría encantado formar parte del cuerpo técnico canadiense en unos Juegos, sería una gran experiencia. No sé si ocurrirá en el futuro. He estado 33 años en la NHL y he llegado a las finales en cinco ocasiones, ganando tres de ellas, así que estoy bastante satisfecho con mi carrera”. Una carrera en la que sólo falta el broche olímpico. Aún le queda tiempo para conseguir rematarla.