Listas

GRANDES CAMPEONES DEL DEPORTE SIN MEDALLA OLÍMPICA

El deporte puede llegar a ser cruel e injusto hasta con los más grandes campeones. Deportistas de élite que lo han ganado todo a nivel individual o por equipos en competiciones de clubes o selecciones nacionales en todo tipo de campeonatos de alto nivel -incluyendo Mundiales-  acaban sus carreras sin haber logrado ninguna medalla olímpica. Medalla que en muchas ocasiones se habría convertido en su trofeo más anhelado y buscado, mas nunca conseguido. En algunos casos su carrera se habría justificado con una sola presea olímpica, en otros, habría sido un título más a su larguísimo palmarés. Repasamos unos cuantos deportistas que, en todos los casos, se encontraban en pleno desarrollo de sus carreras durante –varios- ciclos olímpicos (por ello no se incluyen casos como los de los tenistas John McEnroe o Bjön Borg, activos cuando el tenis no era olímpico). Los dividimos en deportistas individuales y por equipos, puesto que la debilidad de sus selecciones en muchos casos les impidieron lograr la gloria olímpica:

-Deportistas individuales:

Vanessa Ferrari (Gimnasia artística, Italia)= Aún en activo pero con escasas oportunidades de lograr una medalla en Tokio 2020 –si llega- la bresciana tocó el cielo muy joven, cuando se proclamó campeona del mundo del concurso all-around en Aarhus en 2006 a punto de cumplir 16 años. Acudió a los Juegos de  Pekín 2008 a pesar de una aguda tendinitis. Cuando iba tercera en la clasificación individual una salida del practicable en el ejercicio de suelo acaba con todas sus posibilidades de medalla. En Londres 2012 no gana una medalla, la de bronce, por un simple aspecto del reglamento: en la final por aparatos de suelo empata en el tercer puesto con la rusa Mustafina. En lugar de entregar dos medallas se tiene en cuenta la nota más alta de ejecución, en lugar la del coeficiente de dificultad. La italiana se queda sin medalla. La mala suerte la persigue en su siguiente aventura olímpica, pues también en suelo, en Río 2016 finaliza en cuarto lugar. Justo después tiene que ser operada en el tendón de Aquiles. Definitivamente desafortunada Vanessa Ferrari en Juegos Olímpicos.

Bianka Panova (Gimnasia rítmica, Bulgaria)= Otra campeona mundial en el año previo a unos Juegos Olímpicos que, llegados estos, no da la suficiente talla. Su caso es aún más sangrante al haber batido todos los récords de oros posibles en el Mundial de Varna -en año preolímpico-, hasta el punto de entrar en el Libro Guinness de los récords. Sin embargo, su fallo en Seúl 88 por una caída de aparato bien pudo deberse a las erróneas condiciones de entrenamiento que la búlgara padecía y que la llevaron incluso a ser expulsada del equipo.

Maria Petrova (Gimnasia rítmica, Bulgaria)= Sin llegar a ser tan clara su candidatura al podio como la de su compatriota Panova, Petrova fue considerada una de las grandes de su deporte. Tuvo la mala suerte de coincidir con la desintegración de la Unión Soviética, lo que amplió enormemente el abanico de sus rivales. Petrova ganó en su carrera nueve oros mundiales y era considerada la representante de la más pura prestigiosa escuela búlgara. La versátil Petrova comparte con otras gimnastas el récord de mayor número de campeonatos individuales all-around, pero nunca conseguiría subirse a un podio olímpico.

Pete Sampras (Tenis, Estados Unidos)= Poseía todos los récords del tenis…hasta que fueron superados sólo recientemente por figuras de la talla de Roger Federer y Rafa Nadal. Su palmarés continúa intacto e impresionante, pero sin rematarlo con una medalla olímpica. Podría haberla conseguida en dos ediciones olímpicas que van de Barcelona 92 a Sidney 2000. En la primera ocasión ya tenía conquistados una Copa Davis y varios grandes torneos, aunque aún no había alcanzado su culmen. Para los Juegos de Atlanta varios Grand Slam y el número 1 del mundo, pero ni siquiera acudió a la cita, en su propio país. Finalmente, poco antes de los Juegos de Sidney Sampras conseguiría su séptimo Wimbledon, pero tampoco se desplazaría para jugar la que sería su segunda Olimpiada ¿No encontró la motivación suficiente para dar lo máximo en unos Juegos Olímpicos?

Martina Navratilova (Tenis, Checoslovaquia/Estados Unidos)= Bien es cierto que en los mejores años profesionales de esta jugadora el tenis no entraba en el calendario olímpico, pero a la longeva Navratilova le dio tiempo de disputarlos. Pese a que desde Seúl 88 podría haberlo hecho, no fue hasta Atenas 2004 cuando se dispuso a participar en sus primeros Juegos. Contaba entonces con 47 años. A Seúl decidió no acudir por cansancio; a Barcelona 92 se lo “impidió” un contrato publicitario. En Atlanta ya se había retirado, pero volvió a las pistas en 2000, como doblista, pero tarde para acudir a Sidney 2000. En los Juegos de Atenas, pese a ser la cabeza de serie número 3 junto a Lisa Raymond y de haber superado en primera ronda a las potentes Amelie Mauresmo/Mary Pierce, caería en segunda frente a la pareja japonesa Asagoe/Sugiyama. Fin de la breve aventura olímpica de Martina Navratilova.

Foto de AFP

-Deportes de equipo:

Rafa Pascual (Voleibol, España)= En clara desventaja por pertenecer a una selección sin fuerza en el mundo de su deporte. O al menos no la suficiente como para subir a un podio olímpico. De hecho, cuando por primera vez participó en unos Juegos fue en los de Barcelona únicamente por ser el país organizador. Rafa Pascual fue un jugador excelso al que la selección se le quedaba pequeña. Premiado como el mejor jugador del mundo, ganador de títulos europeos e italianos (la competición italiana está considerada la mejor del mundo), fue la estrella de los múltiples equipos por los que pasó. Sin embargo, un hombre no hace a un equipo, así que Pascual hubo de contentarse, al final de su carrera, con un Europeo con una España que mejoró –seguramente en gran parte gracias a él-, aunque volvería a bajar de nivel. Poco trofeo para una de las mayores figuras de su deporte.

Foto de Bernardo Pérez

Dirk Nowitzki (Baloncesto, Alemania)= Otro destacadísimo jugador en su deporte que lograría llegar al súmmum del baloncesto jugando en la NBA. No solo eso, sino que en sucesivas ocasiones ha sido elegido entre el mejor quinteto de tan potente liga, MVP de la temporada y de las Finales, integrante del partido de los All Star y un sinfín de méritos individuales dentro de su deporte de conjunto. Porque Nowitzki ha tenido que conformarse, jugando con la camiseta de Alemania, con un bronce mundial y una plata europea. ¿En Juegos Olímpicos? Desde que integró la selección nacional en 1999 ha vivido la no clasificación para los Juegos de Sidney, idéntico resultado para los de Atenas. Por fin pudo ser olímpico en Pekín, clasificándose en última instancia en el Preolímpico. El jugador llegaría a ser el abanderado de Alemania. Sería lo único destacable que hiciera en unos Juegos Olímpicos. En las dos siguientes ediciones su país no llegó a clasificarse.

Foto de Filippo Monteforte/AFP/Getty Images

Tony Parker (Baloncesto, Francia)= Casi se le pueden aplicar las mismas características que en el caso de Nowitzki que se resumen en grandísimo y destacado jugador perteneciente a una selección menor, aunque los títulos de Francia ganados con Parker –selección de la que es la indiscutible estrella- son más que los del alemán, pues el francés cuenta en su palmarés con cuatro medallas Europeas, entre ella un oro. En el mayor evento deportivo, sin embargo, Parker solo ha podido protagonizar grandes actuaciones que de poco han servido a su selección: en Londres cayó en cuartos ante España; idéntico resultado en Río ante idéntico rival. A las anteriores citas ni siquiera se pudo clasificar.

Foto de Jamie Squire/Getty Images Europe

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *