ALMUDENA CID: “ME SIENTO ORGULLOSA DE HABER ABIERTO UNA BRECHA EN LA GIMNASIA RÍTMICA”

Han pasado casi ocho años de la emotiva retirada de Almudena Cid en el tapiz olímpico de los Juegos de Pekín, pero ella sigue dedicada de una manera u otra a la gimnasia rítmica, bien comentando las competiciones en TVE, bien escribiendo cuentos semiautobiográficos donde la protagonista –llamada Olympia, como no podía ser de otra forma- es una niña gimnasta, o bien regalando a las aficionadas a este, su deporte, tutoriales en internet. Charlamos con ella largamente de esas y otras muchas cosas.

Sobre su récord mundial (única gimnasta de rítmica en haber sido finalista olímpica en cuatro Olimpiadas seguidas) nos habló con la distancia que suponen esos ocho años pasados desde su retirada: “El haber pasado mucho tiempo te hace reflexionar mucho sobre tu estancia en el deporte, sobre lo que ha supuesto para ti, lo que has generado…Además tienes la posibilidad de ver cómo ha calado tu carrera deportiva en las niñas, etc. Me siento muy orgullosa sobre todo más que por el tema de los cuatros Juegos Olímpicos – que evidentemente sí, es una hazaña, no lo ha hecho ninguna gimnasta en el mundo, es algo muy complicado porque las carreras deportivas suelen ser breves-, pero de lo que más orgullosa me siento es de que vean a una gimnasta mayor, madura -me refiero, más de los 20 años- y una mujer en tapiz  y no se cuestiona. Porque yo pasé por la cuestión desde los 20 hasta los 28 y eso ha servido a que ahora una gimnasta esté ahora con 25 años o 28 ó 30 o los que sean y lo vean como ya normal. Me siento súper orgullosa. Creo que he sido la que ha abierto brecha. Me lo reconoció Bruno Grandi [Presidente de la Federación Internacional de Gimnasia]. He tenido la sensación de que he marcado en ese aspecto un antes y un después y creo que ha sido una evolución para nuestra profesión”.

Podríamos pensar que los Juegos Olímpicos, que sin duda han marcado su carrera, podrían suponer para ella una importancia desmedida. Sin embargo, no es así: “[Los JJOO] tienen la importancia justa: mi carrera está marcada por un hito histórico-deportivo olímpico. Una vez que entro en el equipo nacional me empiezan a hablar de unos Juegos Olímpicos y poco a poco es cuando me voy dando cuenta de que valgo para esto. Me costó un montón asimilar cuando me pusieron de primera gimnasta, tuve muchos problemas de autoestima…Para mí fue un sufrimiento. Hablarme de Juegos Olímpicos era como de depresión, antes de los primeros en que competí. Cuando ya llego me di cuenta de que es una competición más. Lo que les diferencia es el entorno, no la competición. De hecho hay menos gimnastas que en un Mundial. Lo que te marca es la convivencia que hay en unos Juegos y la dimensión que coge el deporte a nivel mundial”.

Almudena Cid da más relevancia al legado olímpico en la ciudad sede que al antes y después que pueda tener en la carrera de un deportista: “Soy defensora de lo que realmente ofrece el deporte que en teoría es que deje un legado deportivo en la ciudad en que se celebra y, a nivel mundial, que la gente que va a visitarlo que viva ese ambiente deportivo. Porque luego el deporte no deja de ser política. Si nos ceñimos a lo que significa el olimpismo es maravilloso. Para mí haber vivido durante 15 días rodeada de gente de todo el mundo en una mini ciudad hecha para nosotros, conviviendo y viendo que los equipos están menos competitivos a nivel personal es maravilloso, porque estamos todos en un ambiente bonito. Se disuelve esa tensión que ocurre en un Mundial”.

La ex gimnasta no solo dio a su deporte un nuevo elemento (el Cid Tostado, un rodamiento de rodillas con la pierna derecha estirada hacia arriba) y se dedica en cuerpo y alma a enseñar y hacer amar su deporte entre las niñas. También crea afición desde hace un tiempo como comentarista televisiva y nos transmite desde su micrófono su pasión por la rítmica: “Me emociona mucho ver una competición donde yo he estado, donde sé lo que se siente. Estar en un micrófono, fuera de esa línea del tapiz, contando y viendo lo que está ocurriendo y no poder evitar sentir lo que sienten. Cuando tengo que retransmitir a gimnastas a las que admiro o me gustan se me nota un montón y luego sé que hay diferencia con las gimnastas que no me atraen. Con el equipo español me he emocionado en este último Mundial porque sé por lo que han pasado estas chicas. A mí me influye la historia, para bien y para mal”.

La agradable charla con este hito del deporte español dio para mucho. En una próxima entrada publicaremos sus comentarios sobre su paso por cada uno de los Juegos en los que participó, pero adelantamos una impresión general sobre este magno evento deportivo: “La imagen más brutal fue en Pekín, porque todo era exageradamente perfecto. Sidney fue innovador en cuanto a infraestructuras, pero Pekín sobrepasó la parte de la atención. En el preolímpico nos dieron una hoja para rellenar y escribir lo que nos faltaba y yo puse una plancha: pues ahí estaba la plancha cuando llegué. Había muchos voluntarios a nuestro alrededor. Me llegó hasta a molestar que nos abrieran la puerta; ahí  yo ya dije que tenía brazos y piernas y no necesitaba  que alguien me hiciera  de mayordomo. Pero cuando acabaron los Juegos aquello quedó desértico. Ahora las instalaciones olímpicas son de quita y pon y eso me da mucha pena. Donde surtieron efectos reales unos JJOO fue en Barcelona. Eso sí que supuso para la ciudad y para el país un antes y un después. Ahora bien: seguimos viviendo de aquello y creo que hay que espabilarse”.

Acabamos con una divertida anécdota de la deportista, ocurrida durante Pekín 2008: “Reivindicando el papel de la mujer en la gimnasia rítmica me ofrecieron hacer la portada de FHM, una revista para hombres, y acepté si el artículo que publicaban demostraba que podíamos ser mujeres y deportistas. Para mí fue súper embarazoso bajar en un ascensor con la selección de baloncesto y que éstos comentaran la revista. Les oía decir: “Estoy al lado de la de la revista”. Yo les pregunté si les había gustado…la entrevista y me dijeron “¿La entrevista? La entrevista también”. Me dio bastante pudor pero me encantó hacerla para demostrar que al lado de niñas de 16 también hay mujeres de 28”.

(Podéis encontrar la segunda de esta entrevista en este enlace, en la que se detallan sus participaciones olímpicas contadas por ella misma)